Entonces dame porno,
dame duro, dame espasmos en tiempo real.
La industria no para. Es la codicia.
Me pongo de rodillas, ofrezco mi nuca,
me pongo en cuatro patas, es todos contra todos,
este coito en cadena no ha tenido lugar.
Ha penetrado todos los lugares.
Multiplicar es la tarea.
Los orificios, los desperdicios,
las medidas de seguridad, los flujos de intercambio,
las lenguas que anestesian la conciencia,
las manos excitadas que se llevan
la comida a casa.
Quiero comer tu cara,
los conductos despegados de todas las caras,
las membranas húmedas y calientes,
nómades y anhelantes de todos los conductos
en la línea de succión fordista,
en el área wi-fi de visión congestionada,
quieren atarme, les pido que me aten,
todos de acuerdo en la Disolución Final.
This is hardcore.
El músculo no duerme, la ambición trabaja,
me baja la cabeza, me trabaja, me lubrica,
me estimula a bajar
hasta la triple
X.
Abro la boca para que me la llenen.
Si no tuviera dientes sería
mucho mejor.
Impactante.
ResponderEliminar"La tarea del escritor es que sea más difícil creer a los saqueadores mentales. La tarea del escritor es hacernos ver el mundo tal cual, lleno de muchas reivindicaciones diferentes y papeles y vivencias.
Es tarea del escritor representar realidades: las realidades abyectas y las realidades del éxtasis." Susan Sontag
Susan Sontag en el ensayo "Ante la tortura de los demás" hace unas reflexiones sobre las torturas en la carcel de Abud Graid. En las fotografías vemos que las torturas están sacadas de escenas pornofráficas, confluencia de la tortura con la pornografía, repertorio de imaginería pornográfica que avanza un paso más en la dialéctica de la atrocidad y la crueldad.
"Abro la boca para que me la llenen.
Si no tuviera dientes sería
mucho mejor."
La mujer como contenedor y como agujero.
Un fuerte abrazo
Cuando yo era chico la pornografía me excitaba. El falo descomunal de John Holmes penetraba en los huecos desprevenidos, la Ciccolina se devoraba al padre y al hijo de un solo bocado.
ResponderEliminarNo me gusta hablar de los tiempos pasados como "mejores", pero el porno está demasiado plastificado. Ya no hay penetración. Los gemidos son tan falsos que no los cree ni un niño.
Hemos perdido la fantasía, la hemos perdido en todos los ámbitos de la existencia. Por eso estamos así. Tan perdidos. Plastic Passion. Plastic Kiss.
Pd: La bella canción de Pulp es This is hardcore...viene al caso???
La pornografía como casi todo tiene su momento y su circunstancia. Así como en el pasado algunas cosas me resultaban muy cursis y hoy tienen lugar en mi vida, así también la pornografía. En el libro Tokyo Blues de Haruki Murakami hay una chica que le encanta ir a ver películas pornográficas pero se hace tan cálido ese encuentro, tan hasta te diría antropológico que si fuese cambiada una sola frase, un solo adverbio resultaría cursi.
ResponderEliminarCon sorpresa y sonrisa he leído tu poema. Mariel, sabes que me gusta muchísimo cuando te pones poéticamente gamberra, cuando provocas una sorpresa (tan difícil en los tiempos que corren) y cuando le buscas la poesía (y se la encuentras) a esos estados tan íntimos y tan concurridos a la vez... Buffff
ResponderEliminarSorprende tu poema sobre el porno, me parece genial. El porno me repugna. No por lo que hacen o por la exhibición de los cuerpos, sino porque siempre tengo la impresión de que todo el placer reside en el asalto a la dignidad, en la invasión casi violenta del cuerpo. Me gusta la conquista inteligente de los cuerpos desnudos y del placer compartido.
ResponderEliminarSaludos.
Todo cuanto acontece en el ser humano es sometido a juicio, en especial lo mas íntimo. Las balas, las bombas, el crimen y la guerra son en cambio, aptas para todos los públicos.
ResponderEliminarMe encantaron tus palabras.
ResponderEliminarEl deseo de carecer de dientes, me recordaron a Peter Greenaway en "Una Z y dos O", en el que la amante de los mellizos se iba cortando las piernas para ser penetrada más cómodamente.
Provocador él.
Y vos también
Este Pájaro que provoca y que penetra nos hace soñar y fantasear sin parar.
ResponderEliminarLa pornografía y el erotismo son alimento, como la poesía, la música, el vino.
Queremos alimentarnos, siempre con todo eso, hasta la disolución final.
Besos XXX
Un poema realmente curioso. Está la lectura facil, la sexual o la lectura más metafísica o metafórica; esa relación sadomaso con la sociedad, con cierta rebeldía, hay penetración, pero ojo con los dientes, que muerden.
ResponderEliminarSaludos.
Increíble, bravo amiga.
ResponderEliminarHas descrito franca y sin pudores, todo lo que vende la sociedad moderna sobre el sexo.
Me quedo disfrutando con la fuerza de tu poema.
Un abrazo.