Las cosas han cambiado.
De niña,
me secuestraron mansamente
en un supermercado,
mientras mi madre buscaba las monedas.
Ahora sospecho de todo.
Vi la tremenda fisura. La olí.
Vi el horroroso desajuste,
deliberado, que la ensancha.
Lo que me sorprende, sin embargo,
es por qué sigo haciendo lo que hago.
Lo que me aterra, realmente,
es por qué sigo haciéndolo
sin necesidad de que me pongas
una pistola en la cabeza,
sin tener madre ni padres,
sin tener,
luego de preguntármelo,
prácticamente nada que perder.
Ahora sospecho de todo.
Y pulo mis articulaciones de autómata
para que me secuestren,
como quien pule y guarda,
en una caja,
una pila de monedas
inútiles.
Mis patéticos treinta denarios.
lo leí 2 veces y me parecieron 2 escritos diferentes...y no te sorprendas, será el efecto estocolmo...uno se enamora de su secuestrador al fin, dicen...beso
ResponderEliminarMariel, espero que se mantengan tus torres gemelas, seguro que sí, hay buenos pilares.
ResponderEliminarMe encanta tu poesía, que lo sepas, no es ningún piropo.
Un abrazo a un ratito de irme de vacaciones.
Mariel, el día en el que las más altas torres cayeron, lo ví sin creérmelo en una habitación en la que mi madre en coma se estaba muriendo. Y yo con ella.
ResponderEliminarDeseando que me secuestren, con el objetivo de que me maten a besos.
Gracias por todo, cúbrete de amor y ternura en ese frío invierno.
Aquí, derretimiento cerebral.
Un abrazo
A veces nos bebemos el agua sin sed, y nos recordamos fugitivas.
ResponderEliminarMe enamora tu poesía.
Besos, una onza ;-)
Mirar la fisura y sostenerse con la fuerza de una articulacion para no caerse. Mantener la pistola bien sujeta contra la sien, por si el vertigo nos falla.
ResponderEliminarTela marinera, como me gustaaaaa, voy a tener que replantearme la visión del mundo, guau, me encantó. Un beso.
ResponderEliminarUn canto sorprendente y consternado. Pero vital. Es el deseo de ser en otro, es la contradicción cotidiana, es la íntima y confusa esencia humana. Un abrazo, feliz de poder seguir leyéndote siempre.
ResponderEliminar"(Cosa pseudoprofunda) (Elogio) ¡Visita mi blog! (entre líneas o sobre ellas)."
ResponderEliminar¿A ti no te dejan comentarios de este tipo? Mierda de inteligencia de vacaciones y democracia internetera. Mejor deja este comentario en privado, no sea cosa que alguien se mire en el espejo y se vaya a dar por aludido. Yo, por ejemplo.
Besicos!
Las enseñanzas a los golpes habrán dado sus frutos, pienso. Un abrazo.
ResponderEliminarSiempre vivimos secuestrados mansamente,aunque jamas lo adviertamos...tu poesía enamora,esto y de acuerdo siempre.
ResponderEliminaramanda,
ResponderEliminar"Excusatio non petita, accusatio manifesta".
Cada uno tiene su forma de ir...
Tú, ve a la tuya...
Cada cual ya sabe qué es cada cosa. No vengas a otro blog a decirlo. Dilo en el tuyo.
Mariel, perdona que opine sobre lo que, quizá, no me incumbe. O sí.
pero...
ResponderEliminaryo no había puesto aqui un comentario?