PÁJARO DE CHINA

sábado, 12 de septiembre de 2009

NO PUEDE ESTABLECERSE LA COMUNICACIÓN

Christian Boltanski, Los abonados telefónicos (instalación), 2000


Vino Susú y dijo: Imagino de los libros salir líneas que unieran cada nombre con sus queridos, amigos, familiares, conocidos... en diferentes tonos. Imagino la presencia de los nombres borrados, atestados por sus lazos, con permanencia indeleble. Registros de afectos, la lista de gente que queremos y que nos quiere, en diferentes intensidades, porque así son y se nos representan... "Señores del registro: hagan el favor de lanzarme una intensa línea color tomate hacia el capítulo 3, del tomo XXIV, apartado 15, que me he enamorado". "Tracen una nueva línea, de colorines, hacia donde estuvo mi padre, que hoy he recordado cuánto le gustaba leer cuando todos nos habíamos ido a dormir". "Línea azul cielo hacia mi perro, que hoy ha tenido frío por primera vez en el año, y se ha arropado con mis manos" ...



Lo que captura al ojo, entre tanta abundancia de papel de colores y cuando se mira desde cierta distancia, es el espacio vacío. Google Earth es irrelevante. Lo que importa es la distancia entre el ojo y el mundo y Google Earth no registra la distancia necesaria para ver el hueco. No es un dato cargado en su archivo. Un archivo de guías telefónicas es lo que tengo frente a mí. Las que faltan son más evidentes que las que están. Las que están muestran por contraste las ausentes. Es como cuando te inyectan líquido de contraste para ver los órganos con claridad. Claramente algunos no fueron registrados.

El mecanismo de control, clasificación e inventario es simultáneamente un mecanismo de exclusión. Sucede todo el tiempo. Abro la boca y digo una palabra en lugar de otra. En cada acto ejecutado hay un acto ejecutado. Ejecutar significa hacer y también matar. Elegir es sacrificar, necesariamente. Nadie debiera resultar un elegido. Hay luz suficiente para verlo. Abajo directamente no hay nada.

¿Quiénes faltan? ¿Quiénes decidieron no estar o no pudieron ingresar a este archivo? ¿Cuál es el nombre de los muertos, de los no nombrados, de los que se reservan el nombre para intentar no ser localizados? Especialmente, de aquellos que hubieran deseado estar y no pudieron o de los que quisiera que estén pero se han ido. Los nombres que contra su voluntad o a pesar de la mía no se escriben o ya no son escritos. Los nombres de los dados de baja.


En el espacio vacío, una vez visto, caben la indiferencia, la furia o la nostalgia. Algunos aprenden a sentir lo que no está. Ver es un estado emocional y una predisposición psíquica. Enfurecerse por las manos que apartaron a tantos de la lista, por la mano que se llevó a tantos que debieran estar del otro lado de la línea. Llorar por lo perdido. Seguir hablándole, al aire de los huecos. Gritar hasta quedarse sin aire, para que no haya aire donde se puso el grito. Hablar en nombre de los que no tienen nombre. Aferrarse al teléfono como un amante no correspondido.

A los muertos hay que soltarlos, hay que dejarlos ir para no irse con ellos y hay que seguir nombrándolos para que sigan vivos. Hay vivos muertos de múltiples muertes y muchos debieran resucitar. Otros, no.

Paso las páginas que siguen el orden alfabético. El alfabeto es un simulacro y todo está en desorden. No sé a quién busco. Miro las guías abiertas, abandonadas sobre las mesas a mi alrededor. Alguien se trepó a una escalera buscando un nombre. No hay nadie en la sala. Los huecos abren la boca y no pueden hablar. No hay señal, se cortaron los cables, no hay conexión, se perdió la llamada. No puede establecerse la comunicación.

Hacen un esfuerzo extraordinario, veo las mandíbulas en movimiento de las que no se cae ni una palabra, se concentran y vuelven a intentar pero es como si estuvieran cosidas o como si fueran transparentes. Son bocas mudas, son bocas de viento. Y los estantes de abajo están llenos de bocas, son agujeros de los que salen bocas, son estantes desesperadamente llenos.

19 comentarios:

  1. Como siempre, tus textos son brillantes. Me quedé mirando las fotos para ver si encontraba algo, si veía algo tras los estantes. No, no vi nada.
    Pensé en ese dictador que dijo que un desaparecido no tiene entidad, es eso "un desaparecido, no existe, no está y por lo tanto, no se lo puede buscar." No era así, literalmente, pero esos párrafos están cargados de un cinismo que aterra tanto como los lugares que quedan vacíos.

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  2. Me encanta Boltanski en la F.Serralves, Oporto, vi una obra suya que no podre olvidar. La guardo para dedicarle un post.
    ¡¡¡¡¡¡aplausos sordos a tu blog!!!!

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  3. Y tienes que ser tu, pájaro cantor quién me diga que me ha suicidado sin saberlo: hace años, dije a telefónica que suprimieran mi nombre de la guía...y lo hicieron, cada año, cuando me llega la guía nueva, me busco y no me encuentro.
    Nunca sabré cuántos notan mi ausencia...

    (Te eché de menos)

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  4. Mariel: Su post me trajo a la memoria (reciente, por cierto) una frase de Jauretche: "El que está atento solo a lo que piensa la gente hoy, se quedará al margen de lo que pensará la gente mañana y aquí está la clave para saber quién es dirigente o no. Además, lo que piensa la gente no está dicho por lo que proclaman en voz alta sino por lo que se dicen en voz baja y aún más, por lo que no se dice y está en el subconciente." Arturo Jauretche, año 1959.
    A veces la verdad está en los vacíos, en lo que no está. A veces, la ausencia da carácter vivo a alguna cosa (qué siniestro sobrevivir por lo que no vive)

    Saludos desde Mundo Aquilante!

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  5. Durante todo el día de hoy me están sucediendo cosas extrañas, indicios de señales, conversaciones telefónicas, entradas de blogueros, recuerdos, todo como conectado y superponiéndose. Si son señales no acabo de interpretarlas... y lo que me ha pasado con tu texto. Lo he leído y después he apagado el ordenador, ya llevaba mucho rato y quería, además, pensar, releerlo antes de dejar un comentario. Entonces me he sentado, he cogido Emily Dickinson y lo he abierto, como de costumbre, al azar y lo que ha salido ha sido esto:

    "Those who have been in the Grave the longest-
    Those who begin Today-
    Equally perish from our Practise-
    Death is the other way-
    Foot of the Bold did least attempt it-
    It -is the White Exploit-
    Once to achieve, annuls de power
    Once to communicate-"

    "Aquellos que han estado en la tumba más tiempo-
    Aquellos que hoy empiezan-
    Desaparecen por igual de nuestros Métodos-
    La Muerte es el otro camino-

    El Pie de los Audaces es el que menos intentó emprenderlo-
    Es -la Hazaña Blanca-
    Si se logra una vez, la facultad anula
    De comunicación-

    Un abrazo.

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  6. Libros callados, como muertos ¿a qué esperáis?

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  7. Siempre me intrigó la vieja máxima existencialista de que estamos condenados a la libertad. La libertad, efectivamente, exige renuncia. Por eso es una condena.

    Pero no todos vemos las cosas tan negras, o al menos, no siempre las vemos tan negras. La nueva física y la nueva mecánica confirman la existencia de vida en el hueco, o de agua en el hueco, o de algo en el hueco. La diferencia estructuralista tan marcada entre uno y su contrario resulta no serlo. N existen los contrarios. El dualismo puesto en duda: en realidad el no-ser forma parte del ser. No son dos cosas diferentes y opuestas: son la misma cosa. Resulta divertido jugar con esas ideas y ver a qué playas nos llevan. Lo que sí tengo claro desde tiempo, y es un poco lo mismo, es que las casualidades, tal como se entienden en esta dimensión tan engañosa que habitamos, no existen. Todo responde a una causa.

    Al final resultará que tenía razón el plasta de Guillén cuando cantaba aquello tan carca de "El mundo está bien hecho". Besos

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  8. Cada uno anda con sus huecos encima. Los vive de forma que son ya otra cosa pero, como dice el amigo Ramon, son. Como suenan tremendos los silencios. Como el dolor del miembro amputado. Son vacíos o fantasmas o etiquetas labradas a plomo, pero nada sería lo mismo sin que existiera ese hueco.

    Parece, Mariel, como si con pocas horas de diferencia tú, Ramon y yo hubiéramos decidido hablar de una misma cosa. Los kilómetros, las habituales distancias entre una y otra mente, son preciosos huecos de lo mejor hecho de un mundo medio bien hecho. Siento que estos vacíos me completan. "Ver es un estado emocional", sentencias, vivísima. Y elijo, casi como feliz condena, elijo ver y renuncio a olvidar.

    Magnífico texto, amiga... siempre. Besos hechos de un tipo de materia a medio camino entre el ser y el ser sin estar. Besos profundamente reales.

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  9. "El alfabeto es un simulacro y todo está en desorden."

    Me ha dejado boquiabierta. Hace poco escribí un texto en el que decía "lo que le dura un abecedario", pues iba de una niña que esperaba y mientras lo hacía se repetía para sí misma el abecedario, que empieza y acaba, a... y zeta. Gracias a esto me hicieron descubrir que el abecedario, en realidad, es infinito, que quién te dice a ti que no falta entre la eme y la ene otra letra y no la conocemos, y que quién sabe si los niños pequeños de hoy sabrán que hubo una vez una elle y hubo una che, letras hoy ausentes, desclasificadas, caídas en el olvido, en el silencio, y que por qué es a, be, ce y no pe, ele, i. Puro desorden. n verdadero simulacro, que está ahí, al que nos agarramos para intentar comunicarnos.

    Me voy de aquí tan pensativa...


    Un dulce beso.

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  10. Como dice Caetano:
    Os livros são objetos transcendentes
    Mas podemos amá-los do amor táctil
    Que votamos aos maços de cigarro
    Domá-los, cultivá-los em aquários,
    Em estantes, gaiolas, em fogueiras
    Ou lançá-los pra fora das janelas
    (Talvez isso nos livre de lançarmo-nos)

    Mi biblioteca física, cada año, aumenta su tamaño, pero la de mi corazón, la de mis libro favoritos, es cada estación más acotada. Creo que releyendo no más de 10 libros podría ser feliz y aprender toda mi vida.

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  11. (Se me ha borrado el mensaje)

    Decía que tus prosas son preciosas. Que me gusta mucho coomo escribes, están llenas de imaginación, de profundidad, de partes concavas, de huecos que se palpan, de ritmo.

    En cuanto a los nombres decía que cuando pronunciamos Mariel, no es un nombre es una persona que hay detrás del sonido que sale desde la garganta. Un ser humano que tiene sonrisa, belleza, sensibilidad como para escribir así.
    Cuando por la calle escucho "Berta" una madre llama a su niña en el parque, instintivamente me giro. Porque no es un nombre es el nombre de mi madre.

    Yo creo que el nombre es bonito cuando hay una persona detrás.

    Un abrazo.

    ¡Ey, soy Lola!

    (A ver si este sale)

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  12. hoy he querido hacer lo siguiente:

    no he leído tu entrada. ninguna palabra. tampoco los comentarios. me he dedicado a percibir. a ver la cosa misma. adentrarme en ella.

    es perfecta.

    besos,

    òscar.

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  13. Una estantería llena de guías de teléfonos es un almacén de nombres, algo muy parecido a un registro civil. Un almacén de nombres, en cierto modo, es un compendio de vidas, porque cada nombre está ligado, con los intangibles lazos de la palabra, a una vida. Ante una estantería semejante, uno sólo puede abrir una guía telefónica, buscar un nombre al azar y preguntarse a quién pertenece ese nombre, a qué vida está ligado, cómo será la persona que lo tiene, cómo será su vida. Y, como bien dices, pensar en los olvidados, en todos aquellos que no figuran en las guías, en todos los ignorados por ese inmenso registro de nombres.

    Un abrazo.

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  14. Cuando llegue a Suecia, luego de pasar por la inexorable maquinaria del aprendizaje del idioma, consegui una practica en la comuna de Malmö. Una practica en el Departamento de integracion (de los inmigrantes, claro esta) y del mercado de trabajo (si, no es joda, m-e-r-c-a-d-o d-e t-r-a-b-a-j-o), para ser bien precisa "Integration och arbetsmarknads avdelningen".
    Resulta que como yo era inmigrante, y estaba de practica en el departamento de "integracion" me propusieron realizar algunas tareas relacionadas con la "integracion". Hete aqui que di con unas listas bien detalladas, en donde estaban exhaustivamente inventariados todos los inmigrantes en la comuna de Malmö, y clasificados por procedencia, entre otras muchas cosas.
    Las contradicciones nunca me alientan ni me intrigan, mas bien me desilusionan y desmoralizan. Pierdo el interes. No hay vuelta.
    Y a mi me resulto contradictorio y casi aniquilante que el Departamento de integracion tomara como punto de partida para "integrar" la separacion pulcra de los inmigrantes por procedencia. Que importaba si Zulano era de alli, o si su madre era de alla? Tampoco me parecia relevante si Mengano era de aqui, pero su padre y su madre no. Yo me preguntaba que catzo seria yo, porque en realidad yo era una mezcla de padre italiano, con madre española con un twist ingles, y nacida en Argentina... en realidad que era yo? De donde venia? Era sudamericana? O mas bien latina con un twist? O?
    En ese momento no pude explicarmelo de otra manera. Para mi era la "contradiccion" lo que me tiro para atras. Digo "explicarmelo" como para hacerlo intelectual, porque en realidad en mi todo comienza por los sentidos. Yo no tenia visiones intelectuales. En realidad eran malestares sensoriales, dolor de cabeza, hinchazon en el cuerpo, y a veces como una sensacion de estar embotada.
    Mi practica no duro mucho, obviamente.
    Creo que con tu post vos das otra dimension a la explicacion de mi malestar. En realidad las listas no solo eran hediondas, sino que sus datos eran irrelevantes. Lo que faltaba en ellas era justamente lo que importaba. Datos tan vastos y profundos, que ni google ni el pentagono podrian sistematizar.
    "Lo esencial es invisible a los ojos", decia Saint-Exupéry. Yo agregaria ademas que lo esencial, es, por definicion, inclasificable.
    Besos esenciales.
    Vani

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  15. Siguiendo la imagen de Ramiro, imagino de los libros salir líneas que unieran cada nombre con sus queridos, amigos, familiares, conocidos... en diferentes tonos. Imagino la presencia de los nombres borrados, atestados por sus lazos, con permanencia indeleble. Registros de afectos, para facilitar la tarea que comentaba Blanca en el Cajón: la lista de gente que queremos y que nos quiere, en diferentes intensidades, porque así son se nos representan... "Señores del registro: hagan el favor de lanzarme una intensa línea color tomate hacia el capítulo 3, del tomo XXIV, apartado 15, que me he enamorado". "Tracen una nueva línea, de colorines, hacia donde estuvo mi padre, que hoy he recordado cuánto le gustaba leer cuando todos nos habíamos ido a dormir". "Línea azul cielo hacia mi perro, que hoy ha tenido frío por primera vez en el año, y se ha arropado con mis manos". "Por favor, subrayen de nuevo el trazo que me une a Mariel, que hoy, de nuevo, me ha hecho pensar en qué poco importante es la razón,y cómo de relevantes los afectos".

    Besos lazados.

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  16. Darío: Sí, estos estantes pertenecen, junto a otros que no está allí por otras razones, también a los desaparecidos, que "no tienen entidad". ¿Recordás el gesto del dictador, no? Señalaba el aire. Me estremece que hayas recordado esto. De esto habla Boltanski, sin cesar. Beso sublevado.

    MBI: Tu post-Boltanski (si es el que yo vi y no tenés otro guardado en la galera de tu cámara) es ... punzante. También lo es lo que decís: Boltanski no puede olvidarse y habla de lo que se olvida, para sustraerlo del olvido y la desaparición. Besos ruidosos.

    María: Tu suicido clasificatorio es un acto de resistencia. Te escapaste del archivo y el inventario. Los que te necesitan saben donde encontrarte sin usar el teléfono. Tu reino no está en las guías y las guías no incluyen las llaves especiales que abren esos reinos. Un abrazo muy fuerte (me hace tan bien que estés acá).

    Bel: Yo creo en las señales. Tengo una red para atrapar señales (como mariposas) pero solo un instante, después las suelto para que sigan enhébrandose con otras. Te conté lo que hago con los diccionarios. Tu diccionario es mejor que el mío. Es Dickinson. Intentemos ser el pie de los audaces. "El pie de los audaces", "the foot of the bold", es sencillamente exacto y conmovedor. Porque es el pie, es el pie el que se desmarca, se adelanta, se sale de la fila, a veces hasta se saca los zapatos y va descalzo, o se pone las botas de guerrear. Pero es el pie. De nada sirve la boca o la mano si no actúa el pie. Si el pie no se mueve. Besos envueltos en señales de humo.

    Esther (cómo me gusta tu nombre, ¿me lo prestás?): Esperan darse cuenta, supongo. Quitarse la venda de los ojos. Tomar como una excepcionalidad insoportable lo que consideran natural. Y una vez que esté claro, juntar fuerzas y adelantar el pie, el pie de los audaces, como Dickinson le susurra a Bel. Un abrazo hecho de papel de cuaderno escolar, como el de tus poedibujos, o dibupoemas.

    Ramón: Sí que hay vida en el hueco. Hay que entrenar el ojo para verla y, cuando lo necesita, sacarla de allí. Y yo también creo que las casualidades no existen. No sé quién traza el camino (¿un dios menor? ¿la poesía?) pero estamos dulcemente condenados a encontrarnos, en los países personales que fundamos y reivindicamos como propios. Nuestra íntima geopolítica. Eso es. Besos, petons, molts.

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  17. Susú: Sí, sí, estamos hechos también de nuestras oquedades, que se van convirtiendo en otra cosa. A veces cicatrizan y uno pasa la mano amorosa o temblorosamente por la cicatriz, a veces duelen, tironean, nos obligan a recordarlas (como el miembro amputado, el miembro fantasma). Y otras veces son huecos que el amor completa y sana, o huecos que están ahí (como el mar entre vos y yo) para que lo saltemos y lo salvemos, estrechándonos. No había pensado en esta doble definición del hueco, como pérdida y como desafío cumplido, como agujero y como cajón (sí, como tu Cajón) que se va poblando sin cesar. Sé que elegís mirar. Mis besos son profundos y reales, también (no tienen huecos).

    (* (como un signo trazado en la arena con un palito de madera, creo que ya te lo dije): Sí, quién te dice cuántas letras se tragó el diccionario. El alfabeto es una convención arbitraria, invita a darlo vuelta a ver si se le cae alguna letra escondida. A trastocarlo, a meterle mano, a dejarlo en bolas, digamos. Y si no salen nuevas letras, que las palabras sí lo sean. Lenguajes inventados, como uno que inventó Cortázar en Rayuela, como el lenguaje de los dadaístas, como los nuevos lenguajes de los pintores que marcan líneas de ruptura. No hay cambio, no hay vanguardia sin un nuevo lenguaje. Y lo que decís de las letras clausuradas, expulsadas, es tan cierto. Es como la lucha de los que hablamos español para que introduzcan la "ñ" en los dominios de Internet y en los teclados. Letras silenciadas. Y palabras violentadas, abusadas, usurpadas. Palabras apropiadas. Lenguajes enteros en la sombra. Dialectos prohibidos. Hay tanto en lo que decís (¿será por eso que elegiste un signo como símbolo de tu identidad?). B-E-S-O-S.

    Pablo: Ay, esa canción de Caetano, Livros ... Quiero que alguien me diga, ya: "Tropeçavas nos astros desastrada, mas pra mim foste a estrela entre as estrelas". Me lo digo yo y basta. Hay que escribir algo tan bello como "tropezabas en los astros, desastrada". Creando una palabra tan próxima a "desastre" y uniéndola inmediatamente al brillo de una estrella. Y el párrafo que elegiste. Cultivar libros en acuarios. Sobrevivirían los que pueden respirar bajo el agua, como los buzos de la peli "Azul profundo". Sí, para los libros de la biblioteca del corazón sobran los dedos de la mano, como para los amigos. Un abrazo de libro sin tanque de oxígeno.

    Ey, Lola-que-es-Lola: Entro por la "o" de Lola y miro conmovida palabras pulidas hasta el hueso, manos que mecen palabras como si fueran cunas, escaleras construidas con estados de ánimo y múltiples amores y una hija que gira la cabeza cuando alguien dice "Berta" en una calle. Es tan hermoso lo que contás, Lola-que-sos, que yo no puedo decir más nada. Sobrevivimos en nuestros nombres. Un abrazo enorme.

    Oscar: Que puedas ver la cosa es un don de tu condición de búfalo. Que puedas prescindir de la palabra y ver, sin significantes ni soportes ni diccionarios. Ver la cosa sin necesitar saber su nombre ... Así sos. Y yo te abrazo.

    Ramiro: Mi cabeza pone en imágenes tus palabras, porque son palabras para ver. Alguien que se sienta en el almacén de nombres y tiende lazos para imaginar vidas. Para ver lo que hay detrás y debajo de cada nombre. Lo que debiéramos hacer cada día, supongo, en el almacén que cada día es y en los lugares que el almacén niega, en el cartelito de "cerrado" que pone el señor almacenero o el cartelito de "vuelvo enseguida" (cuando para algunos no vuelve nunca). Tomar los volúmenes pesados de las guías y rastrear la historia, pero no la Historia (con mayúsculas) sino la historia minúscula de los extraviados que somos todos nosotros y los que no tienen boca para decirlo. Gracias por estar acá. Un abrazo.

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  18. Mundo Aquilante: Sí, lo que realmente se dice está muchas veces en lo no dicho. En el inconsciente. Ahí se sumergen los psiquis como detectives y se nos revelan los deseos en nuestros sueños. La ausencia habla. Habla lo que se eligió callar. Habla lo que hubiera podido decirse pero no, no se dijo. Y ciertas cosas y cierta gente tienen el don de sobrevivir, hasta doler, en la ausencia. Por cierto, Jauretche-inmortal. Besos dichos y no dichos, o sea, completos.

    Sis V-mujer-sensorial: Sí, lo esencial es inclasificable. Es lo que se le escapa al Google y al Pentágono. No se le escapa a la pintura, a la poesía, a todo lo que se resiste al inventario y el repertorio cerrado. Yo diría que más bien sos un twist. Twist & Shouts, diría. Así te hubiera ingresado en el archivo de Mälmo. Entiendo tus azoramientos estomacales ante las guías. Cómo si las cosas pudieran ordenarse así, como si ese fuera el orden de las cosas ... Besos desordenados, dados vuelta, despeinados y en jogginetas (así no paso ningún despacho oficial).

    Susú: Tus palabras son tan extrañables y certeras que ya las subo, para que reinen sobre los archivos. Me salió "reinen" ... como la "reina". La línea que nos une resiste, cambia de color y, por definición, no puede cortarse. Te envuelvo de arriba a abajo, y de abajo a arriba, con esa línea.

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  19. Dice Portinari: Los nombres vacíos, desprovistos de un cuerpo, de una mirada que sesga ese espacio entre el nombre y el cuerpo. En la circuncisión que jamás han podido hacerme se me han ido todas las letras del poco nombre que me quedaba al nacer.
    En cada hueco falta una letra.

    "La distancia entre el mundo y el ojo". "Abro la boca y digo una palabra en lugar de otra. En cada acto ejecutado hay un acto ejecutado. Ejecutar significa hacer y también matar. Elegir es sacrificar, necesariamente. Nadie debiera resultar un elegido. Hay luz suficiente para verlo. Abajo directamente no hay nada."

    "En el espacio vacío, una vez visto, caben la indiferencia, la furia o la nostalgia. Algunos aprenden a sentir lo que no está. Ver es un estado emocional y una predisposición psíquica. Enfurecerse por las manos que apartaron a tantos de la lista, por la mano que se llevó a tantos que debieran estar del otro lado de la línea. Llorar por lo perdido. Seguir hablándole, al aire de los huecos. Gritar hasta quedarse sin aire, para que no haya aire donde se puso el grito. Hablar en nombre de los que no tienen nombre. Aferrarse al teléfono como un amante no correspondido.

    A los muertos hay que soltarlos, hay que dejarlos ir para no irse con ellos y hay que seguir nombrándolos para que sigan vivos. Hay vivos muertos de múltiples muertes y muchos debieran resucitar. Otros, no."

    Qué hacer con un nombre, cuando se ha olvidado, cuando no es recuperable. La distancia entre el cuerpo y el ojo, la distancia entre el ojo y el cuerpo, la distancia entre el nombre y el cuerpo.

    "[...] no hay conexión, se perdió la llamada. "
    "Son bocas mudas, son bocas de viento. Y los estantes de abajo están llenos de bocas, son agujeros de los que salen bocas, son estantes desesperadamente llenos."

    Siento yo que en cada hueco donde falte una letra habrá que crearla con materia de hueso y salvar la distancia entre el nombre y el cuerpo con la memoria y los viajes mentales en tren.

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