El viernes pasado la pasé posta. Me encantan los carromatos y me sé de memoria la historia del circo Sarrasani. La humanidad es una troupe y si no filtramos el espanto con humor, mejor suicidarse en masa a lo Waco. Estamos en deuda con Alexander Fleming y Buster Keaton, en idénticas dosis. No es casual que en los velorios siempre haya alguno que empieza a contar chistes sotto voce y un par que se mean de risa camuflándose entre las coronas. Es fantástico.
El asunto es que el golfista estrella Tiger Woods, que según parece es más aburrido que una novia sin tetas (como diría la muchachada), convocó a una conferencia de prensa transmitida en vivo y en directo por la tele y vía Internet, para pedir perdón con la manita en el pecho por haber engañado a su pulcrísima esposa con cuanto gato con botas (de caña alta) se le cruzó en los alegres campos del puterío.
A las putas les tengo especial adoración y me sale de testigo mi amiguita Perséfone, aquí de látigo presente en la barra lateral. Casi escupo la mandíbula completa cuando vi al nabo al cubo de Tiger recitar su discursete de ocasión, ante su mami y amigos de expresión contrita. La esposa no estaba porque anda con diarrea.
Hace unas semanas Tiger se internó para superar este trance. Parece que la tararira, con perdón de la expresión, dijo basta y llamó a emergencias. Díganme si la foto de la derecha no es para la estampita. Le falta la aureola y tenemos al Cristo negro que nos robaron Franco Zeffirelli y todos los Papas que encargaron cuadros.
Olía a podrido en Dinamarca. Cuando veo algo demasiado planchado, enseguida sospecho.
La actuación de Tiger fue impecable, seguramente porque atrás de la cortina estaban todos sus sponsors con una escopeta. No solo volvió el circo, sino el barroco. Bajo la forma de puro teatro de cotillón y patética moralina conserva. Ahora no nos espantan las gárgolas, sino la pérdida de auspiciantes. Como dijo Carlitos Marx, todo se repite dos veces en la historia, primero como tragedia y luego como Tiger chupeteando a la madre para que lo filmen. Esta frase es genial porque es corta, se aplica a todo y te permite citar a Carlitos sin haber tocado Das Kapital.
Por un momento me pareció que a Tiger se le iba la mano, o más bien la trompa, con la vieja (la señora producida de la foto) y rumbeábamos hacia el incesto. Me entusiamé imaginándome las estrategias de los asesores de imagen y comunicación de Tiger (y los de Nike y afines) ante un Edipo por fin desatado y unplugged para la CNN. Ahí los quería ver. Pero a Tiger un asistente le tiró del saco y se me acabó la fiesta.
Adviértase que la foto ut supra es una especie de Piedad reloaded, en la que a la vieja de Tiger le falta la túnica y la sacra aureola. Muchas nuevas tecnologías y jolgorio posmoderno, pero en el fondo no andamos lejos de nuestros hermanos de taparrabo y garrote, pidiendo explicaciones al prójimo por sus actos sexuales en lugar de aceptar el derecho de cada uno a hacer de su culo un pito y chiflar hasta que se le raje, según su pacto conyugal en vigencia. Faltó Lorena Bobbitt para convertir a Tiger en un Farinelli y mudarlo del golf a la ópera de un solo corte y sin tandas comerciales.
Tiger se acusó de irresponsable, egoísta y tarado (en esto último estoy de acuerdo, escuchándolo recitar su mea culpa con la soltura de Arturito en Star Wars) y de defraudar no solo a su parentela y a los pibes del barrio, sino a todos los niños del mundo que lo tienen como ejemplo.
Qué pena para los niños del mundo, que después del café con leche se encierran a ver porno en la web y ya estaban levántandole a Tiger un altar cuando descubrieron que se patinaba los millones en profesoras como las de la foto (la actriz XXX Joslyn James, que también quiere que Tiger le pida perdón cara a cara). Y sí, ya que Tiger anda declamando perdones, que le tire a la buena de Joslyn alguno de los que le compró al mayorista.
¿De qué tiene que pedir perdón este tirifilo y para qué sirve su perdón, más que para satisfacer a los hipócritas que viven de su ubre?. Asumo que fue feliz en cada revolcada "adúltera" y que no se revolcó a propósito para dañar a su prole. Supongo que en tales circunstancias alguien prepara la valija y se toma el piróscafo o se sigue adelante sin pase de facturas. Montarse un carnaval carioca con la Srta. Joslyn y sus amiguitas no es algo que alguien "le hace" a otro. A Tiger le daría un sopapo por esta mise-en-scene patética, por la carita que pone para la foto y por recurrir a mami para que lo ayude a sacar las papas del fuego.
La posmodernidad es re-progre. Sus Torquemada cotizan en bolsa, se divierten con Joslyn sin que nadie se entere y televisan las confesiones del reo, para que sintamos que la casa está en orden. Aunque apeste.
No sé que pasa. Sólo prendo el televisor para ver Fútbol para todos y Carreras los domingos. Menos mal que vuelve Schumacher, porque el mundo se me estaba tornando aburrido, los domingos sobre todo, claro.
ResponderEliminarEl golf es tan aburrido como Tiger Woods. Nunca un palazo al contrincante o un cross a la mandíbula del ganador. Aburrido. Encima este boludo pidiendo perdón ante el mundo? No podía ir a pedirle perdón a su mujer en la habitación de un motel, echarse un buen taco y las cosas arregladas?
Sociedades hipócritas o pelotudos incurables? Al menos Hugh Grant se degrada sin hacer estos papelones universales. Besho
Buen día!!! qué buena nota! solo puedo agregar: SHOW MUST GO ON !!! Hipocrecía a full
ResponderEliminarVermouth con papas fritas y Good show, dirìa aquel inolvidable Tato Bores que hubiera sabido hacer de este conventillo de cuarta un excelente monòlogo!
ResponderEliminarTu entrada de diez!
Salute
Impecable. Creo que no hay otra palabra para calificar a Tiger Woods que BOLUDO. Se pasó de hipócrita, categoría a la que llegaba cuando se sacó la foto con los hijos, los perros y la esposa. Ahora pidiendo perdón ante las cámaras del mundo se recibió (y con honores) de boludo triste.
ResponderEliminarsólo te corrijo un dato: Elin, la esposa del boludo, no tenía diarrea fue a comprar una calculadora nueva porque los ceros de la cifra que le va a quedar con el divorcio no le caben en la de bolsillo. Parece que antes de la confesión eran unos 300 millones de dólares pero ahora... el festejo será con una zaga de desconches con los morochos del equipo campeón del Superbowl. Le dijeron que en New Orleans son más divertidos. Y la tarasca le alcanza para hacerlo de acá a la eternidad.
Besitos
Jugará bien al golf, pero yo creo que le falta un riego. Aparte de tener las características de un WASP, qué asco!
ResponderEliminarTienes un don, Mariel, SÍ!!!
Todo cuestión de pasta gansa. De beneficios, de dividendos.
ResponderEliminarTienes razón huele mal lo planchado perfecto- me gusta tan poco planchar-y la arruga es bella.
Los guiris ¡dan tanta importancia al sexo!, solo la infidelidad sexual tiene importancia para ellos, ninguna otra.
Lo dices perfecto Pulgarcito, porque no lo arreglan los dos en un Motel, es evidente , eso no vende.
Falaces encuentros. Besos
¡Qué risa, Mariel! Lo mejor, la mujer ausente por diarrea y el sospechoso beso con la madre... La realidad es lo más falso que uno se puede echar a la cara, un abrazo, Yaiza
ResponderEliminarAhora no me acuerdo como se llama la porn star con la que corneo Tiger, pero creo que me ví más películas con ella que con Audrey Hepburn...
ResponderEliminarPerdón, ese comment iba en Perséfone!
Patético el tigre de madera.
ResponderEliminarEl arrepentimiento como utilísimo comodín de chupacirios, en lecho de muerte o nupcial.
Foto de familia + perros = corneta (y no el diario, eh...)
ResponderEliminarDe acuerdo en un todo, Mariel. Para mí, más terrible que esta puesta en escena que describes con tanta sal, es el país que la exige, todo el mundo tiene que pedir perdón públicamente, exhibir sus vergüenzas frente a las cámaras (Clinton, Marion Jones y vete tú a saber cuántos más, aunque, pensándolo bien nunca he oído que aquel jugador de fútbol que apalea a sus esposas y mató a una pedir perdón, pero a lo mejor en estos casos no se exige), pedir perdón a ¿quién? ¿al público televidente? Y esto se lo venden al mundo entero como si al resto del mundo le importara. Sí, que le pida perdón a las call-girls y a todas las muchachas que se le encaramaron sólo por gusto, sólo por pasar un buen rato o por unos miles de dólares y que lo anotaron en un carné como un trofeo más y luego lo olvidaron. Yo lo único que espero es que nuestros países no sigan este ejemplo, que a los gringos les gustaría vendernos, porque si estamos ya tan jodidos, ahí sí estaríamos perdidos de verdad.
ResponderEliminarUn abrazo
algo en todo esto me hizo reir un poco...mi lado oscuro celebra que el deportista con mas guita del mundo pida perdon por algo que la sociedad condena..es como ver una obra de teatro sobre nuestras miserias y limitaciones..y no lo digo por su conducta sino por la de todos..en juzgar, en ver este tipo de shows donde un tipo pide perdon, se humilla y despues se besuquea con su vieja...in god we trust! Estos yankis la tienen adentro
ResponderEliminarBravo, Pájaro. Me he reído y me ha encantado.
ResponderEliminarDices bien al final..."para que sintamos que la casa está en orden".
Parece que vivimos dentro de un circo.
Se me ocurre un montón de gente que debería ponerse delante de las cámaras a pedir perdón, pero sé que a esos nunca los voy a ver ahí.
Besos transoceánicos.
Me pilla despistado el señor, la madre, la esposa, las otras y las mismas. Pero el desgarro de prendas (en pleno apogeo de la autocrítica) me ha excitado la risa, la sonrisa y los sonrojos. Mola.
ResponderEliminar¿Tenemos derecho a juzgar el comportamiento de un arrepentido si optamos por no juzgar las intimidades de la pareja y otros asuntos privados? Me parece bien que declare sumarísimo sus errores y se- fusile-a-sí en el amanecer cortándose la raíz de los pecados. Si acepto "el derecho de cada uno a hacer de su culo un pito y chiflar hasta que se le raje" acepto la inversa y todo ser humano tiene derecho a hacer de su pito un culo y dejar que la opinión pública, el capitalismo in o el amor que retorna a la señora ausente y mentada, le sodomice hasta que el alma se limpie y blanquee. Esta bien blanquear el alma como aquello tipos del Shakespeare y tomar lejía. Pero aceptando el derecho de cada cual a arrepentirse en público, creo que el derecho a reirse en público es derecho paralelo. Sólo faltaba que en nombre de la libertad de prensa y de expresión nos obliguen a mirar seriecitos el circo y la telenovela.
De mucha risa; gracias por el refresco de tu texto (que no es bebida espirituosa pero se nota en el fondo el toque de gin y canela y algún otro secreto de tu escritura que, poco a poco, develaré).
Es tan famoso, es tan importante, es tan, tan, que el orden social le obliga a disculparse ante todos, no es decisión suya,, tiene que explicarse, es un icono......es el precio de la fama, menudo lío tiene.
ResponderEliminarun beso.
Tienes una mano crítica y reflexiva.
ResponderEliminarQué flojera da este hombrecito. Todos se merecen una oportunidad, pero, pero, este personaje qué pasa?
En fin.
PD. Ya tengo mis boletos para encontrarme con Caetano.Uf....corazón latiendo.
Seguimos.
Besotes.
TETAS
ResponderEliminarSi queria pedirme perdón a mi, tendría que haberse empernado a la madre delante de cámara.
La foto de familia perfecta (él, mujer, hijo, perros...todos sonriendo) me causa un irrefrenable, ineludible, irreductible, inapelable e inamovible asco. Pero no puedo dejar de mirarla.
Besote Mariel
Si hay algo que me desarma es el sentido de humor, condición fundamental que demuestra tú excelsa inteligencia. Lo bordas, mientras escribes/describes con un torrente de datos culturales serios, que manejas cómo un "friki" un Mercedes recién lavado.
ResponderEliminarUn espectáculo que merecería pagar la entrada.
besos y gracias, seguiré....expectante.