Por, al menos, un doble de vida para Mujer de Olé
Viejo, acabado, the end.
Fuera de juego, diseño obsoleto, pesado.
Demasiados parches, demasiadas costuras.
El equipo de expertos universitarios
manipula piezas de cuero y material sintético,
trabaja día y noche en un producto
más refinado y veloz,
menos resistente al viento.
Avanzamos hacia el círculo perfecto,
elaborado por la corporación en base al triángulo.
No se deja tocar, se obstina en no doblar.
En la base hay invariablemente una línea de dos.
Será la anacrónica línea de dos la que decida.
Como a la corporación, los mueve el hambre.
Pero es un hambre a contrapelo y a la inversa.
No hay una mano de dios.
Es la desguarnecida línea de dos
la que se suelta, corre y se mete el césped
en la boca.
Veo fútbol (con/por mi hijo). Intento entender la épica y la lírica. Escucho los comentarios forzándome a fijar la mirada en tal o cual. Veo geometría que rompen una y otra vez el azar de un cruce o una patada. Pocos goles (tan distinto del baloncesto). ¿No es un mal rollo ver fútbol en el televisor? Supongo que lo que prima en muchas ocasiones es la insociable sociabilida que se refleja.
ResponderEliminarNo entiendo y "la roja" me parece, como siemnpre, agónica, unamuniana.
Pues, "la roja" acusó los efectos de la jabulani, sobre todo Navas que estuvo muy desafinado y poco certero. Pero, es cierto, el balón parece tener un toque especial, muchos remates parecían elevarse demasiado.
ResponderEliminarBesossss.
Gracias Pájarito.
ResponderEliminarTodo lo que se diga, escriba o teorice sobre la pelota y sus derivados, un hombre maduro y en edad de merecer una copa, y todas las copas, lo tira abajo con un derechazo mortal que encierra justamente una vida.
Palermo es mundial. Ya lo habíamos dicho.
Pero hoy más que nunca.
Abrazo con hambre
Preciosa pintura de los Frankesteins modernos, sin emoción, sin corazón, sin lágrimas.
ResponderEliminarY ya que recordás a la preciosa de Mujer de Olé, todavía nos quedan estos hombres débiles, que lloran a mares, pero que todavía tienen el "hambre".
Un beso furiozzo.
Vi el partido: me he vuelto argentina. Mi padre era gallego, así que no tenía otro remedio.
ResponderEliminarEntendí el fútbol a fuerza de estar tirada en el sofá durante un mundial. Ya que no podía correr me pareció la mejor manera de hacer un poco ejercicio.
Sí la "roja" es "el sentido trágico del gol".
Hermana Louise, espero que el campeonato vaya para allá.
Los partidos son como el ajedrez duchampiano, y en ocasiones se trata de que los peones acompañen al rey: Messi.
Me gusta porque es la antítesis de Cristiano.
Tengo que revisar mis comentarios. Eso de escribir sin revisar me queda patético. Qué es eso de "todavía nos quedan...que todavía..."
ResponderEliminarMal mal. Me repruebo.