PÁJARO DE CHINA

viernes, 21 de mayo de 2010

XI.


(Ahora grabo algo de lo que escribo. Me gusta que me lean cuentos en voz alta, me gusta leer en voz alta en la madrugada. Debajo de lo que escribo está mi voz y debajo de mi voz, no sé, no sé qué hay, pero así está más cerca. Al pie de las palabras, en el dispositivo que dice "song", deliberadamente, porque las palabras son hijas, dignas o indignas, siempre pobres, de la música, sigo buscando. Para escuchar debe interrumpirse el flujo musical de la barra a la derecha, donde cuelgo la música que suena, fuera o dentro de mi cabeza, mientras escribo)




Cómo luchar con estas balas blancas
contra los lentos trabajos de las noches blancas
que secuestran mis brújulas, mi tiza.
Mi corazón se enferma de nieve.
Mi lento corazón es secuestrado.
Mis brújulas, enfermas, se aferran a la tiza
sublevada, disuelta como pólvora lunar.
Amnésica de frente y de perfil,
desheredada, vuelta una sábana
de la que no caen recuerdos,
la huérfana de signos
no hace pie en el agua.
Qué fue de mí que tuve una tarea,
que olvidé mi tarea al reclinarme
en la sombra vacía de lo que perdí.
Qué fue lo que perdí que nunca tuve,
cómo cortar la soga y gestionar
el deshielo.
Sólo mi boca
puede besar mi boca entumecida.
No hay opción terapéutica.
Tengo sólo una boca y debe obrar
por dos, para salir.


12 comentarios:

  1. insomnio, noche en blanco, soledad y silencio, asfixia, volverse hacia sí mismo, tu noche blanca atraviesa los océanos.
    Un beso y espero que a estas horas duermas un poco.

    ResponderEliminar
  2. No sé como se hace para luchar sino luchando. No necesitás decir que no sabés cómo se hace porque lo estás haciendo con estos hachazos.
    21 de Mayo: me debato entre el dolor y la alegría, entre la asfixia y la respiración limpia. Dolor en Caracas, y acá me evado un poco, me voy al Sanatoria que hoy tengo cesárea.
    Besos con toda la furia.

    ResponderEliminar
  3. Mariel, llegué aquí para quedarme, si me lo permites. Me gusta cómo escribes, cómo lo expones, lo que dices y se intuye. Vamos, que me motiva y por eso paso por aquí. Me interesa.
    Un abrazo.
    P.D.:El recitado, precioso. Yo he hecho algún intento y ha ido directamente a la papelera.

    ResponderEliminar
  4. Tú no tienes sólo una boca. Tienes también la nuestra para orar, cuando quieras, contigo. Y por tí. Si no haces pie en el agua flota. Me niego. Me niego a recibir un no como respuesta. Tú lucha. Milagros ocurren todos los días. Te abrazo fuerte. Muy fuerte.

    ResponderEliminar
  5. Muy bueno! y tu voz... maravillosa. El final es genial, me angustia muchísimo "...Sólo mi boca puede besar mi boca..."

    Saludos desde Mundo Aquilante!

    ResponderEliminar
  6. Eso me pasa por querer leerlo todo, alcanzar a donde mis ojos no pueden...leo rápido y me como letras. Donde dice obrar orar y me corrijo. Pero también estoy dispuesta a obrar contigo. Y por tí. Un beso

    ResponderEliminar
  7. Y la canción que nos guía por tu casa, por esos laberintos alucinantes, es hermosa. La encontré una vez en lo de Humo, y me enamoré. Bezo.

    ResponderEliminar
  8. Doble regalo de texto y voz. Deliciosa lectura (¿qué programa has usado para grabar? La calidad es excelente)

    abrazos

    ResponderEliminar
  9. según escucho y veo tu boca hizo un trabajo excelente y salió, ya lo creo que salió.

    es bueno grabarse la voz y luego escucharse, como querido desconocido y atender lo que dice nuestra lenguada en play.

    si texto, bellísimo.
    si vida, adelante, vinimos para acompañarte.

    besos,
    ò.

    ResponderEliminar
  10. Me gustó lo que dices y la posibilidad de escucharte en la lectura.

    Dura tarea ésta de la "boca única que debe obrar / por dos, para salir". Dos, par, doble y la duda de si hay otro pues sólo conservamos rastros, telas deshilvanadas de lo que fue un traje o una vieja camiseta de los Pistols. Dos: quizás paciente y terapeuta, la mamá y su niño descarriado o el amante nuevamente receptor de un perdón que ni merece ni solicita. El mito y su relato, la sombra en el mediodía pasado, poco más que una manchita extraña en la radiografía. Evidentemente, no recuerdo la pregunta pero ya se apuntan respuestas como hormigas

    Perfilas bien el espacio - como siempre - de aquellos que deben (debemos) reconstruir no se sabe qué (quizás el alma) y que, de vez en cuando, tropezamos con bombas no explotadas en el bombardeo y que estallan en la boca desdentándonos el corazón, reiterándonos en la amnesia de la amnesia de la amnesia... (y, hacendosos, seguimos con el lápiz en la mano)

    Un gustazo de sitio(el del Pájaro, no el amnésico.

    Besos en la mañana y buenos sueños

    ResponderEliminar
  11. El insomnio y sus angustías. El final desgarrador:

    Sólo mi boca
    puede besar mi boca entumecida.
    No hay opción terapéutica.

    Te dejo un abrazo

    ResponderEliminar